Durante la mañana del miércoles, José Martínez, padre de uno de los jóvenes, informó que fue durante la noche del martes cuando lograron establecer comunicación con ellos.
Vecinos de la colonia Praderas de San Francisco colocaron una ofrenda se colocó al exterior de la tienda denominada Abarrotes y Carnicería Raque, desde donde salieron los pasajeros del autobús.
Uno de los casos más recientes es el de los dos jóvenes originarios de Michoacán, que iban a ser reclutados por policías de San Cristóbal de la Barranca.
La persecución comenzó en el municipio de Escobedo, Nuevo León, pero terminó sobre el Libramiento Noroeste, en García, a la altura de la colonia Mitras Poniente.