Con tan solo 7 años, Mónica colabora en el negocio de su familia como cajera

Mónica es una pequeña de siete años de edad que se ha sumado activamente en apoyo al negocio familiar, desde hace más de un año colabora con su familia en el supermercado como cajera cobrando las mercancías, recibiendo el pago y dando el cambio sin faltante alguno.

"Un día cuando fuimos al mercado una muchacha estaba cobrando y yo le dije, me enseñas a cobrar, me dijo las claves de todo y yo las anoté en un papelito, yo cobraba y le copiaba al papelito, pero ya me las aprendí de memoria", refirió la pequeña de segundo grado de primaria.

Empezó colaborando en acomodar las mercancías en los estantes, pero su espíritu inquieto la llevó a aprender la labor de las cajeras y un día que tenían bastantes clientes y requerían abrir más cajas, su papá le dijo que les apoyara cobrando las mercancías, para lo cual coloca un pequeño banco para estar a la altura del lector de barras, después baja para abrir la caja y entregar el cambio, labor que desarrolla con mucho entusiasmo porque su visión es llegar a ser la encargada del establecimiento.

"Mi papá me paga y de ahí puedo echarlo a mi alcancía, voy a seguir y cuando esté más grande voy a estar de encargada, aquí está mi abuelita y mis primos y aquí comemos".

Al principio los clientes se mostraron extrañados y hasta incrédulos de que la pequeña les fuera a cobrar las mercancías, ahora llegan con confianza a formarse en la caja de Mónica, quien no ha tenido errores ni faltantes en los arqueos al cierre de la caja.

"Mi hija fue mostrando sus habilidades, se llegó un momento en que por alguna circunstancia ajena a nuestros colaboradores faltaban cajeras y por iniciativa propia le dijimos metete que al cabo ya sabes, primero la cuidaban estaba mi prima checando que diera bien los cambios, y ya de repente sola se le apertura caja y rueda el mundo, domina bien las cantidades y ya va para un año ayudándonos que no ha tenido faltante de nada, todo lo domina bien", refirió orgulloso su padre, Mario Alberto Valles.

Las habilidades de la pequeña han ganado la confianza de la familia, pues no descartan que en algunos años más aprenda la operación total del negocio y desde muy joven pueda desempeñarse como encargada.