La historia de Chachito ha resonado en la ciudad, ya que el joven solo buscaba una oportunidad de trabajo en la panadería para ganar algo de dinero y su vida le fue arrebatada injustamente.
Rodrigo “N”, de 23 años, y Francisco Javier “N”, de 54, fueron presentados ante un juez de control, quien resolvió que ambos deberán permanecer en prisión preventiva.
Momentos antes de la explosión, Don Artemio había enviado a su ayudante a buscar una rejilla, acción que habría evitado que el joven resultara lesionado.
El joven de apenas 12 años de edad enfrenta un proceso por el asesinato de una mujer en Lomas de Angelópolis, motivo por el que padres rechazaron que fuera aceptado en la institución.