Hasta el momento no se ha detallado el material que ha sido sustraído, pero los primeros cálculos apuntan a que las pérdidas son cerca de 100 mil dólares.
En octubre de 2010, tras estar a una profundidad de 623 metros bajo tierra, fueron rescatados 33 mineros de una mina al sur de Chile. Uno de los sobrevivientes vino a Monterrey.