Llegaron

Se llegó la Semana Santa y con ella una verdadera prueba de fuego para los coahuilenses, ya que actualmente en el semáforo epidemiológico, el estado se encuentra en verde y no se duda que al término de las vacaciones los contagios por covid-19 aumenten. Pero en estos momentos parece que todo lo que está pasando alrededor del coronavirus no importa, lo mejor de todo es que se puede salir del hogar, se puede olvidar por un momento la cuarentena.

Llegó la hora en que hay que arreglar las maletas y prepararse para irse a disfrutar de unos días en las playas de Mazatlán o bien, tomar un vuelo para irse a Cancún o de perdida a Parras de la Fuente.

También los duranguenses están esperando el momento y pese a que su entidad se encuentra en semáforo amarillo, saben que los contagios han bajado a su mínima expresión, por lo cual también ya tienen todo preparado para disfrutar de los Días Santos en cualquier lugar del territorio nacional.

En estos momentos, en ambos estados hay vigilancia en los diferentes parajes de la región lagunera, se les está exhortando a los visitantes a tomar las debidas precauciones, no introducirse ni a los canales de riego, como tampoco a las aguas del Río Nazas.

Además, están pidiendo que se tenga mucho cuidado en el momento de preparar discada o carne asada, ya que no quieren que se presenten incendios y que se ponga en riesgo a las familias. Pero en fin, esa es otra historia, ya que en estos momentos la mente parece estar puesta en modo avión, por lo que todo lo que se refiera al covid-19 ha sido borrado momentáneamente.

Claro que hay muchos laguneros que por segunda ocasión se quedarán con las ganas de acudir al Cristo de las Noas para observar el Vía Crucis, el cual podrán ver solamente en forma virtual.

En Viesca, de igual manera se suspendió la tradicional Procesión del Silencio y los habitantes de aquel municipio que podían vender sus productos, ahora se quedarán esperando a los visitantes. Las autoridades estatales de ambos estados, confían en que durante las vacaciones de Semana Santa no aumenten los contagios, lo cual se ve difícil de que no suceda, por lo que solamente hay que esperar a ver en qué termina esta historia y ver si no se aparece la tercera oleada.

walter.juarez@milenio.com