La agencia de Naciones Unidas para la Infancia, lanzó una advertencia: "el número de niños huérfanos o no acompañados de ébola crece tan rápido como la propia epidemia".
Los síntomas de la enfermedad son fiebre, debilidad, dolores musculares, vómitos, diarrea, erupciones cutáneas, disfunción renal y hepática, incluso en algunos casos hemorragias internas.
Esta semana, un predicador con ébola fue identificado tras llegar en autobús a la República Democrática del Congo, días despues se confirmó la muerte del hombre.
Uno de los grandes problemas que hay para poner esta epidemia bajo control es la falta de recursos para las actividades de prevención y preparación tanto en la RD del Congo, como en los países vecinos.