El hombre acusado de haber intentado asaltar una unidad del transporte público terminó severamente lesionado del rostro tras la brutal golpiza que recibió de los pasajeros.
El hallazgo ocurrió cuando vecinos de la zona se percataron de la presencia de personas dentro del domicilio que se encuentra en obra negra y abandonada.
Los policías derribaron la puerta e irrumpieron en el inmueble. Momentos después de la irrupción, se escucharon al menos dos detonaciones de arma de fuego.