Luego de que fue aprobada por diputados, senadores y congresos locales, la reforma de supremacía constitucional se convirtió en una ley y se frenan los amparos contra próximos cambios hechos en la Constitución.
La reforma de supremacía constitucional vuelve improcedentes los juicios de amparo y controversias en los cambios constitucionales aprobados por el Congreso y el Senado.
Claudia Sheinbaum firmó el decreto con el que se revierten cambios hechos con la reforma energética de Enrique Peña Nieto; no se busca excluir la participación privada de CFE y Pemex.
