Tras el incidente, elementos de la Fiscalía General del Estado de Durango, Protección Civil municipal y efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) se hicieron presentes en el lugar para iniciar las investigaciones.
Los grupos de extorsionadores identifican el esquema de la persona buscada, obtienen el número de teléfono que se comparte para contacto, y es ahí cuando inician el fraude.
Hasta este momento, las identidades y el lugar de procedencia de las personas que perdieron la vida en este fatídico evento vial permanecen desconocidos.