A solo un día de haber sido reportada como desaparecida en Puebla, Enriqueta Isabel fue hallada sin vida; su cuerpo fue abandonado en un terreno baldío de Santa Clara Ocoyucan.
Los restos de la mujer fueron hallados en el baño de su domicilio, siendo el olor putrefacto que emanaba del lugar lo que alertó a los vecinos de la colonia El Espinal, en Orizaba.
Un cliente inconforme con uno de sus trabajos sería el responsable de haber asesinado a la mujer en su propio hogar, dejando abandonado el cadáver que fue hallado por los vecinos.
Elementos de Fuerza Civil y de la Guardia Nacional llegaron a una zona habitacional sobre la calle Santa Anita, luego del reporte de restos humanos en el sitio.