Terapia psicológica, parte del tratamiento del vitiligo

El 25 de junio es el Día Mundial del Vitiligo, enfermedad que suele aparecer entre los 10 y 30 años,  pero en México el 50 porciento de las personas que la padecen, la presentan a los 20.  

A Karla le detectaron vitiligo hace 13 años, una enfermedad degenerativa de la piel que provoca manchas blancas en diferentes partes del cuerpo. Surge cuando el sistema inmune destruye los melanocitos, célula que produce el color de la piel.

Las manchas blancas aparecen comúnmente alrededor de ojos, boca; cerca de los oídos, rodillas, codos y manos. Además "la jiricua" (como se le conoce popularmente al vitiligo), no provoca otros síntomas.  

Sin embargo, Karla debe usar protector solar de manera rigurosa en todo el cuerpo, especialmente en las manchas, ya que estas zonas son más sensibles a los rayos UV y a largo plazo, esto la hace propensa a padecer cáncer de piel. 

Aunque, físicamente el vitiligo nunca ha imposibilitado a Karla, admite que la enfermedad sí tiene afectaciones psicológicas que le provocaron inseguridad y falta de confianza.

La terapia psicológica ayudó a la joven de 25 años a aceptarse a sí misma, ahora puede mostrar sus piernas y brazos sin miedo a los prejuicios. E invita a las personas que padecen vitiligo a medicarse de forma adecuada y a recibir ayuda psicológica.   

Aún no existe una cura para el vitiligo, pero su tratamiento consiste en el uso de bloqueadores solares, medicamentos aplicados en la piel y en algunos casos, la utilización de fototerapia para pigmentar o despigmentar la piel. La Secretaría de Salud recomienda que la terapia psicológica también sea parte del tratamiento. 

La Organización Mundial de la Salud estima que entre el uno porciento y dos porciento de la población mundial padece vitiligo, sin embargo, en México no hay cifras exactas de cuántas personas viven con la enfermedad.

MRG