El heredero de la marca de tequila jalisciense, Pablo Partida, desató una severa crisis reputacional al publicar un video donde denostaba a los agricultores de maíz que protestan por precios justos.
Fue a un costado de la carretera federal 123 donde fueron abandonados restos humanos que horas más tarde se confirmó pertenecían a Tito Atlahua, comandante policiaco.
El acusado permanecerá en prisión preventiva por un periodo de seis meses, mientras avanza la investigación de lo sucedido en contra de los policías en Tequila.
El hombre detonó varias veces el arma, lo que provocó pánico, estampidas y gritos de auxilio entre visitantes y familias presentes en el centro de Tequila.