Al menos 69 personas se habrían quitado la vida tras adquirir el fármaco vendido desde Puebla por Daniel González, quien les envió sedante para animal sin ser detectado por la justicia mexicana.
Daniel González habría facilitado el suicidio de cerca de 70 personas de países como Estados Unidos, España, Australia, Canadá, China, Francia, Alemania, Corea del Sur y el Reino Unido; todo lo operaba desde Puebla.
La Comisión de Justicia trabaja una propuesta para modificar el Código Penal a fin de penalizar conductas que inciten al suicidio bajo violencia de género.
Brenda Zavala de la Peña, asesora jurídica de las víctimas, aseguró que luego del avance que tenía la menor, ésta recayó tras enterarse de la libertad condicional que tenía Gerardo ‘N’.