El hombre de 73 años fue obligado a resguardarse en un hotel de Durango, bajo las amenazas de que le harían daño; familiares y él despositaron casi 30 mil pesos a los delincuentes.
Algunos fanáticos que asistieron al evento dieron a conocer que un grupo de delincuentes aprovechó la confusión generada por el anuncio para cometer un robo masivo.