Betzy, madre del menor, continúa en recuperación por las lesiones que recibió; su hijo no tuvo la misma suerte y ha causado indignación por la forma de su muerte.
El accidente fue reportado después de que el vehículo volcara en un vado del río, al llegar al lugar, las autoridades encontraron el razer atorado en medio del afluente.
Familiares y amigos acudieron al panteón Las Llaves de San Pedro para despedir a la joven, quien deja a un hijo en orfandad luego de ser alcanzada por las balas en un enfrentamiento armado.
Fue su propio hijo quien halló el cadáver de Guadalupe N. al ingresar al negocio en Izúcar de Matamoros; tras llamar a emergencias solo confirmaron que ya no contaba con signos vitales.
Elementos de la Unidad Especializada en Atención Temprana y Acompañamiento en Situación de Riesgo de la Policía Municipal de Torreón lograron la detención inmediata de Rodolfo “N”.
Ante la urgencia de la situación y la falta de respuesta rápida en el sistema de salud público, los padres tomaron la difícil decisión de trasladar a su hijo a un hospital privado en Gómez Palacio.
Ausencio y Andrés, de 54 y 23 años respectivamente, murieron luego de ser baleados por un vehículo en movimiento que les dio alcance cuando transitaban por una carretera de Tenango de Las Flores.