Indicó que generalmente los menores acudían al psicólogo por problemas de conducta o autoestima, pero a partir del confinamiento, despuntaron los problemas de ansiedad, depresión y estrés.
El suicidio es multifactorial en sus causas, pero contrario a lo que se cree, no es la depresión el principal motivo para quitarse la vida. Lo que se halla en común entre los sobrevivientes es un sentimiento de soledad y desesperanza.
La depresión del aislamiento social llevó a jóvenes como Francisco a recaer en el consumo de drogas como la marihuana y cocaína hasta llegar al cristal donde tocó fondo al perder a su familia.