Según informes proporcionados por la administración de Joe Biden, en el presente año fiscal se ha logrado confiscar un total de 11.5 toneladas de fentanilo.
Los hermanos de Ovidio Guzmán giraron la instrucción que prohíbe a los "dealers" vender fentanilo, mientras muchos de los que han desobedecido han sido asesinados.
Las investigaciones indican que nuevos grupos delictivos eligen operar en áreas distantes con infraestructuras menos elaboradas, lo que está promoviendo el tráfico de fentanilo.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos bloqueó los activos de los narcotraficantes mexicanos además de prohibir cualquier tipo de transacción comercial con ellos.