La primeras críticas de Insatiable 

La serie de humor negro cuenta la historia de Patty (Debby Ryan), una adolescente que luego de sufrir acoso por ser gorda logra perder el sobrepeso y convertirse en el estereotipo de una rubia sexy. Con ayuda de Bob (Dallas Roberts), un entrenador de concurso de belleza desprestigiado, la protagonista se vengará de todos aquellos que la trataron mal ahora que es una sensual chica deseada por todos... encontrará en la venganza su platillo favorito.

"Insatiable", ya cuenta con algunas críticas, donde se menciona la falla en encontrar una forma de unificar los distintos temas y arcos argumentales que sus diferentes personajes expresan y atraviesan, otros críticos opinan que el humor de la serie es simplemente mezquindad con evidente propósito de ofender.

En general, nadie quedó realmente impresionado con la burla y la reflexión en torno al tema de la autoaceptación que el programa trata de proponer debido a que se tropieza en la ejecución y el planteamiento de sus bromas.

Aquí las primeras críticas que el programa ha recibido:

Tal vez, en el fondo, haya una serie decente debajo de Insatiable. Por ahora, se siente como una docena de diferentes y caóticos shows pasando al mismo tiempo y ninguno de ellos sabe dónde está su propia fuerza.

Mientras que a Insatiable le gustaría hacer pasar su considerable mezquindad con sátira o con buenas acciones, la verdad es que es más un endulcorante que hace podrir los dientes.

La falta de preocupación que esta serie tiene por su personajes es superada solo por la falta de respeto que tiene con sus espectadores. Su superficial provocación es casi tan tonta como sus posteriores intentos de hacerse la consciente.

La controversial serie de Netflix está llena de temas importantes sobre la pérdida de peso, la superficialidad de las apariencias, la identidad, el ser padre y la venganza, pero nunca llegan a convertirse en un mensaje coherente, ni un mensaje positivo. Es un montón de provocaciones, chistes a medias, aleatoria sátira cultural, malos juegos de palabras e intentos de cursilería que no logran hacer un punto.

Isatiable es impresionante en su capacidad para ofender un gran catálogo de ideologías, incluyendo la noción de que la televisión en 2018 debería ser mucho más inteligente y mejor lograda que esto.

Sé que hya un creador humano detrás de Insatiable, de Netflix, pero este show que debería ser para maratonear es tan descuidado que casi pasa por inadvertida genialidad, es la clase de cosa que podría ocurrírsele al algoritmo de Netflix por sí mismo.