Sacerdote acusado de abuso sexual contra madre en Saltillo no ha sido separado de sus funciones
La Diócesis de Saltillo determinó no separarlo de sus labores hasta que no exista una resolución judicial oficial que se pronuncie sobre el caso.
La Diócesis de Saltillo ha decidido mantener en sus funciones al sacerdote identificado como Miguel Ángel “N”, quien enfrenta señalamientos por presunto abuso sexual en contra de una madre soltera en Saltillo.
Pese a la gravedad de las acusaciones que han comenzado a trascender entre los feligreses del sector, la Diócesis determinó no separarlo de sus labores ni aplicar medidas cautelares hasta que no exista una resolución judicial oficial que se pronuncie sobre el caso.
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El religioso, perteneciente a la parroquia Nuestra Señora de Schoenstatt, ubicada en la colonia Australia, es señalado por presuntamente haber realizado tocamientos indebidos a una madre soltera.
El hecho denunciado habría tenido lugar en un kínder situado justo a espaldas del templo. Tras el incidente, la afectada compartió lo sucedido con personas cercanas, lo que permitió que el caso se hiciera público dentro de la comunidad de Saltillo.
No obstante, la Diócesis de Saltillo ha tomado una postura de cautela legal, que resulta en la continuidad ministerial del sacerdote.
De acuerdo con la información oficial proporcionada por la Diócesis, la institución no procederá a la separación de funciones del religioso mientras no se concrete una resolución judicial.
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Cura niega acusaciones de presunto abuso sexual
El obispo Hilario González García sostuvo comunicación directa con el sacerdote Miguel Ángel “N” para abordar los señalamientos. Tras el encuentro, el religioso negó categóricamente las acusaciones presentadas en su contra.
Ante la negación y la ausencia de una determinación legal, la Diócesis decidió no aplicar las medidas cautelares solicitadas o esperadas por la comunidad, manteniéndose a la espera de que sean las autoridades competentes quienes se pronuncien oficialmente sobre la culpabilidad o inocencia del sacerdote.
Es importante destacar que, hasta el momento de esta publicación, no se ha presentado una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado de Coahuila (FGE).
De proceder legalmente la acusación y de llegar a comprobarse la culpabilidad, el sacerdote Miguel Ángel “N” enfrentaría graves consecuencias, tanto civiles como eclesiásticas. Podría ser sujeto a una pena de prisión impuesta por la autoridad judicial, así como la potencial pérdida de su investidura religiosa dentro de la Diócesis.

Mientras el panorama legal se define, la mujer afectada ha solicitado justicia y protección, debido al temor de posibles represalias en su contra.
Con información de Kevin Carranza...
JVS
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