Resultó ser un mal perdedor

Mientras que por un lado Mario Delgado, dirigente nacional de Morena daba a conocer los resultados de las tres encuestas, en las cuales quedaba Armando Guadiana como candidato a la gubernatura de Coahuila, además mencionaba que “ya lo pasado, pasado”, refiriéndose a la confrontación que existió entre el senador y Ricardo Mejía Berdeja, por el otro, el Subsecretario de Seguridad Nacional envió un mensaje vía Facebook en el cual desconocía las resultados de las encuestas. Para Mario Delgado, no hay nada que cicatrizar, ya que no hay heridas abiertas, mientras que Mejía Berdeja no dejó de tirarle con todo a Guadiana Tijerina, a quien señaló de ser parte del Moreirato y por si fuera poco, de estar en contra de Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México. Dijo también el funcionario federal que él tiene décadas apoyando al Mandatario de la Nación, cuando de todos es conocido que por muchos años perteneció al PRI, algo que no puede ocultar y tampoco negar. Se puede decir que es comprensible su reacción, ya que según las encuestas que él pagó lo tenían bien posicionado en toda la entidad, además, pensaba que lo que había invertido en volanteo, en espectaculares, en folletos y hasta en la marcha a la que según sus números acudieron 15 mil de sus simpatizantes, le ayudaría a ganar la candidatura a la gubernatura. Para muchos morenistas la reacción de Ricardo Mejía Berdeja da entender que es un mal perdedor, que no acepta que Armando Guadiana es el político del partido en el poder mejor posicionado en la entidad, el más conocido y al que al final escogieron los simpatizantes guindas. Que muy diferente fue la reacción de Luis Fernando Salazar, quien entendió que las encuestas lo dejaron en segundo lugar, por lo que de inmediato reconoció al senador como el ganador y además lo felicitó. Todavía el lagunero se dio tiempo para decir que estaba con el senador en el nuevo proyecto que empezará el primero de enero rumbo a las elecciones a gobernador en el mes de junio. Pero además, sabe Fernando Salazar que no tiene para donde irse, por lo cual lo único que le queda es seguir en el partido y apoyar a Guadiana Tijerina en su campaña. No cabe duda que esta historia todavía no termina, ya que Ricardo Mejía no se quedará con los brazos cruzados, mientras que Mario Delgado no cometió el mismo error que en Durango, en donde dejó fuera al senador Ramón Enríquez, que era el mejor posicionado y colocó a Marina Vitela, error que le costó una estrepitosa derrota a Morena. Ahora solamente falta esperar que habrá de hacer Mejía Berdeja y hasta dónde lo dejará llegar el mismo Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, quien le pidió que respetara los resultados de la encuesta realizada por Morena.

ANDAN DESESPERADOS Y BUSCARÁN QUE OTRO PARTIDO LOS ACEPTE.- Que la gente cercana a Ricardo Mejía Berdeja, quien quedara fuera de la contienda por la gubernatura representando a Morena, andan más que molestos, encolerizados, ya que sienten que lo que habían invertido no lo recuperarán, por lo que andan gritando a los cuatro vientos que el Subsecretario de Seguridad Federal habrá de participar en las elecciones del 2023 representando a cualquier otro partido que lo acepte. Que con lo que andan diciendo, prácticamente ya están aceptando la derrota de Mejía Berdeja y ahora lo que buscan es que si no es por Morena, pueden hacerlo representando a los partidos “patito”, esos que solamente sirven para hacer montón. Que Mejía Berdeja quiere impugnar las encuestas, pese a que Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, pidió que se respetaran los resultados en los que Armando Guadiana fue el elegido para ser el candidato de Morena a la gubernatura.

Walter.juarez@milenio.com