Caos por todos lados

OBRAS POR TODOS LADOS.- Torreón en busca de beneficiarse con obras de relumbrón y que puedan ayudar a mejorar el tráfico vehicular, en estos momentos está viviendo un caos vial por diferentes rumbos del municipio. 

De por si ya es muy alto el número de autos, camionetas y no se diga de motocicletas, por lo que en cualquier parte de la ciudad el circular se ha convertido en un verdadero problema, ya que los embotellamientos están a la orden del día y además, en los cruceros semaforizados hay que esperar de dos a tres ocasiones en que la luz verde vuelva a ponerse en el semáforo para poder continuar el recorrido al destino final. 

A esto hay que agregarle las obras que el ayuntamiento de Torreón lleva a cabo, las cuales en estos momentos se han convertido en serios obstáculos para poder avanzar, por lo que en lugar de hacer 15 minutos para trasladarse de un punto de la ciudad a otro, ahora se llevan hasta 30 minutos o más. 

Que difícil se ha vuelto circular por el bulevar Independencia a la altura de la calzada Abastos, ya que ahí se llevan a cabo obras que con el tiempo darán una mejor fluidez al tráfico vehicular, pero además en ese crucero cuando llueve se convierte en un peligro para los automovilistas y ahora ese problema quedará solucionado. 

En estos momentos están repavimentando el bulevar Diagonal Reforma, por lo que se puede observar en el mismo un caos vehicular, además muchos conductores se observan desesperados, se cruzan de carriles para buscar avanzar más rápido. 

Además, en sus rostros se nota la molestia que las obras les están causando y el tiempo que están perdiendo durante el flujo vehicular que se ha formado. También hay molestia entre quienes van el mismo Diagonal Reforma y al llegar al bulevar Revolución, debajo del puente Diana Laura, las obras que están por terminar, no dejan de causar molestias entre los conductores.

En estos momentos a estos problemas hay que agregarle el problema que se tiene con las peregrinaciones, mismas que van por la avenida Juárez en sentido contrario y por donde hay cruces, es un verdadero calvario pasarlos. 

En su momento los desniveles Cuatro Caminos y periférico con Independencia fueron un dolor de cabeza, pero ahora los beneficios de estas obras muchos conductores las disfrutan.

Walter.juarez@milenio.com