A favor y en contra

LA DISCADA MÁS GRANDE DEL MUNDO.- Se realizó la discada más grande del mundo para establecer un nuevo record y hubo muchos que se sintieron identificados, al ser un platillo supuestamente lagunero y el cual hay que presumirlo tanto en México como en otros países. 

Es un guisado para disfrutar por los distintos sabores de sus ingredientes y este platillo se ha hecho toda una tradición en los diferentes municipios de la región. Fueron cinco toneladas de discada las que se prepararon y se supone que se sirvieron 80 mil tacos. 

El evento se llevó a cabo en el Centro de Convenciones de Torreón y familias de La Laguna tanto de Coahuila como de Durango, desde temprano empezaron a llegar para ser testigos de esto evento que pone a los laguneros en el radar mundial, pero además para disfrutar de sus ricos tacos. 

La construcción del disco fue toda una odisea y muchas familias no se imaginaban ni el tamaño ni la forma en que se cocinarían todos los ingredientes para formar la discada, pero además, la forma en que los chefs y sus ayudantes habrían de estar moviendo constantemente la carne con todo lo que lleva, incluido el tocino, chorizo, así como la cebolla, jitomate y demás. 

Hasta ahí todo está bien, ya que quienes acudieron disfrutaron del momento y como se dice, compartieron los alimentos bajo el ritmo de notas musicales de los grupos que se hicieron presentes. 

Pero por otro lado, como siempre, no pudieron faltar aquellos que no están conformes con llevar a cabo este tipo de eventos, sin importar que se estableciera un récord mundial, ya que sienten que fue mucho dinero lo que se invirtió, principalmente en construir ese gigantesco disco, luego comprar todo lo que conforma una discada, para la cual se necesitaron miles de kilos de carne de res y puerco, de chorizo, de tocino, así como de las diferentes verduras. 

Sienten que en la región lagunera hay mucha pobreza, que en lugar de gastarse tanto en un evento para sacar 80 mil tacos, bien ese dinero que se invirtió se pudo repartir entre los más necesitados. En fin, cada quien defiende su postura, su visión de ver las cosas y lo mejor de todo es que al final se estableció el récord de la discada más grande del mundo.

Walter.juarez@milenio.com