El incidente tuvo su origen en una manguera de gas que se encontraba en mal estado, la cual comenzó a liberar combustible de manera incontrolada; esto terminó siendo un tormento más grande para los asistentes.
Una pipa con 45 mil litros de gasolina fue embestida por un tren en Santa Catarina, provocando una fuga de combustible y la evacuación de tres empresas.
Una revisión interna detectó que decenas de patrullas y vehículos dados de baja o fuera de servicio siguieron recibiendo combustible durante 2024, lo que provocó un presunto desfalcO.
Los elementos policiacos se percataron de una pipa de gran capacidad que se encontraba conectada directamente a los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), en lo que se presume era una toma clandestina.