Las causas de muerte aun están en duda debido a que en un principio se dijo que había sido atropellado, pero después se manejó que tenía heridas de bala.
La dirección de Inspección y Verificación detectó que el lugar no contaba con ningún tipo de permiso para vender alcohol, por lo que procedió a su cierre.
Una joven de 20 años convulsionó en una reconocida farmacia ubicada en la carretera Torreón- San Pedro, por lo que elementos de la Cruz Roja arribaron al lugar para atenderla.