Sin respetar la sana distancia y el uso de cubrebocas, una gran cantidad de personas se reunió para festejar esta celebración sin importar los estragos de la pandemia.
Se cancelaron desfiles, fiestas y casas embrujadas, ya que están prohibidas las reuniones numerosas y por temores de que las espeluznantes celebraciones propagarían el coronavirus.
Para evitar aglomeraciones de personas, el funcionario presentó dos teléfonos para realizar reportes de personas que no acaten las medidas y expongan a los demás con fiestas alusivas a la celebración.
Por tal motivo se llevó a cabo la detención de 15 personas, quienes fueron puestas a disposición del Juzgado Cívico quien determinó la sanción por dicha falta administrativa.
Tanto en México como en diferentes países esta frase es utilizada para pedir algún caramelo o de lo contrario los niños podrían realizar una travesura al dueño de la casa o local al que acuden a pedir su calaverita.