El gobierno de EU anunció que mantenía los preparativos para la cumbre entre Trump y Kim, aún después que Corea del Norte arrojó una sombra de dudas sobre la realización del evento.
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, solicitó a Naciones Unidas que participe como organismo observador en el proceso de desnuclearización de Corea del Norte.
"Las cosas van muy bien, la fecha y el lugar de la reunión con Corea del Norte se están concretando", dijo el presidente de EU tras señalar que habló con Moon Jae-in.
La demanda de sopa "Pyongyang naengmyeon" se disparó en Seúl tras el encuentro entre Corea del Norte y del Sur, donde el platillo formó parte del menú.