La misión a México, que fue anunciada el lunes, habría alarmado a algunos en la jerarquía católica: sólo un día después, el nuncio apostólico en México, Franco Coppola, reveló que el Vaticano ha estado investigando a cuatro obispos mexicanos.
Los funcionarios de la Santa Sede enfatizaron que no se trata de una comisión de investigación sino de una “misión de asistencia” que ayudará la Iglesia mexicana a combatir los abusos sexuales en su seno.
El Vaticano solo había dicho anteriormente que Francisco sufría una "ligera indisposición" que lo obligó a cancelar la mayoría de las audiencias en los últimos tres días.
Francisco, el primer papa del hemisferio sur, ha mantenido relaciones estrechas con mandatarios latinoamericanos izquierdistas como Da Silva y el expresidente boliviano Evo Morales.